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¿Té o Café? ¿Cuál es mejor para nuestro organismo?

Té y Café

¿Té o Café?…he ahí el dilema.

Hasta hace algunos años creíamos que el té era una de las bebidas más sanas después del agua y que el café era el único que contenía cafeína, resulta que esto no es así. Se han realizado estudios donde ha quedado demostrado que el té también contiene cafeína en la misma dosis que el café.
La cafeína no es exclusiva del café o del té, también se encuentra presente en algunos refrescos e incluso en algunos medicamentos como los analgésicos.
En su forma natural tiene un sabor muy amargo y las bebidas que la contienen están muy procesadas para disimular dicho sabor.
La cafeína es una droga que se produce naturalmente en las hojas y las semillas de muchas plantas y se considera una droga porque estimula el sistema nervioso central, aumentando nuestro nivel de alerta.

Para muchos de nosotros la cafeína produce una mejora en nuestro estado de ánimo y nos puede hacer sentir con más energía de manera temporal.

Es cierto que al té se le han reconocido más efectos positivos para la salud que al café, a éste se le han atribuido consecuencias negativas como alteraciones en el ritmo cardiaco, manchas en la dentadura e incluso cáncer. A pesar de esto, el café tiene muchas propiedades que ofrecer para beneficios para la salud.

Café, una bebida de tradición mundial

granos de café

El café no solo es un gran estimulante, también tiene un efecto vasodilatador y parece tener un efecto preventivo en la aparición de enfermedades tales como la diabetes y algunos tipos de cáncer.
Aquí te damos algunas razones por las que el café es beneficioso para la salud.
Aparte de ayudarnos a despertar por las mañanas, beber una taza de café para empezar el día nos permite concentrarnos y desarrollar nuestras actividades de una manera más eficaz.

Pensamos en el café como una simple mezcla de agua y cafeína, pero esta infusión tiene muchos nutrientes esenciales para nuestro organismo.
Una taza de café contiene riboflavina (vitamina B2), ácido pantoténico (vitamina B5), manganeso, potasio, magnesio y niacina.

También es un poderoso antioxidante, debido a esto, nos puede ayudar a retrasar el envejecimiento de las células, algo que se asocia a disfrutar de una mejor salud cardiovascular.
Beber café en cantidades moderadas, puede ayudarnos a vivir más y mejor,
puede prevenir algunas enfermedades y se ha demostrado que las personas que consumen entre 2 o 3 tazas de café al día pueden reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, respiratoria, ictus, diabetes, infecciones y lesiones.
Debido a los efectos de la cafeína su consumo excesivo puede producir un aumento en la presión arterial.

El Té,  ¿ La bebida de la aristocracia?

Hojas de té

Por otra parte el té ha sido considerado por mucho tiempo como una bebida de la aristocracia, afortunadamente esto ha ido cambiando con el paso del tiempo, puesto que su consumo se ha popularizado por sus beneficios en otros sectores de la sociedad.
A pesar de que algunos gustamos del té en sus distintos aromas y variedades conocemos poco de sus múltiples beneficios.

Comencemos por hacer una pequeña aclaración con respecto al té ya que solemos llamar té a todo tipo de infusiones y lo cierto es que no es del todo correcto.

En el sentido más estricto del término, el té es como conocemos a la planta Camelia Sinesis y también es como llamamos a la bebida que hacemos con las hojas de esta planta. El resto de las bebidas preparadas a partir de hojas de plantas o frutas sumergidas en agua caliente, se denomina Infusión.

Los beneficios y propiedades del té y las infusiones, son mayores que sus contraindicaciones, ya que su consumo en exceso, sobre todo del té, puede ser perjudicial para el metabolismo por su contenido de Teína que químicamente es igual al de la cafeína.

Tanto el Té blanco, negro, rojo, verde, sea cualquiera su forma o tipo, lo cierto es que posee increíbles beneficios para la salud, como antioxidantes que reducen el estrés y mejora nuestro sistema inmunológico, por mencionar algunos.

Tomar un té caliente en un día frío puede resultar muy reconfortante y aportar una serie de beneficios, vamos a descubrir algunos.

Té Blanco

Té Blanco

El té blanco ha sido descubierto recientemente como el antioxidante más potente de la naturaleza, es más eficaz que el té verde por contener tres veces más polifenoles; un antioxidante presente en todos los tipos de té y muy conocidos por aumentar las defensas del organismo y neutralizar la actividad de los radicales libres.
Los radicales libres causan oxidación de las células que en ocasiones pueden causar cáncer.
También es capaz de proteger la producción de lípidos 10 veces más que el té verde, este té por si solo es más eficaz que la vitamina C y la vitamina E juntas.
Disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer, disminuye los niveles de colesterol en la sangre, sobre todo la lipoproteína de baja densidad (LDL).
Protege la dentadura de las caries, combate la fatiga, estimula las defensas y el funcionamiento mental, también evita el paso de azúcar a la sangre.

Té Verde

Té Verde

El té verde es una de las bebidas que más beneficios aporta al ser humano. Entre varias de las propiedades que se le atribuyen, algunas ya comprobadas científicamente se encuentran, prevenir la diabetes, ya que controla los niveles de azúcar en la sangre, también posee grandes cantidades de antioxidantes, previene el cáncer, mejora la salud cardiaca, ayuda a desintoxicar el hígado, estimula el sistema digestivo, previene la artritis y tiene una poderosa acción analgésica y antiinflamatoria, combate el mal aliento y estimula el sistema inmunológico.

Té Rojo pu-erh

Té Rojo

El té rojo es una de las clases de tés más conocidas después del té verde.
Es un gran aliado natural que puede ayudarnos a combatir distintos tipos de problemas en nuestro organismo, algunas de sus propiedades más relevantes son estimular el metabolismo y ayudarnos a perder peso, colabora con la digestión y es ideal por su acción diurética, favoreciendo la eliminación natural de toxinas y evitando la retención de líquidos.

A su vez el té rojo ayuda a controlar los niveles de colesterol en la sangre, estimula la producción de acido gástrico que favorece el metabolismo hepático y genera sales biliares muy buenas para la digestión.
Por lo antes comentado, el té rojo está mas que recomendado para perder peso.

Te Negro

Té Negro

Es una de las infusiones más clásicas que conocemos. Al igual que el té verde proviene de la misma planta, la Camellia Sinesis, la diferencia de este té, está en el proceso de producción.
Consta de cinco fases: marchitado, enrollado, fermentación, secado y clasificado. Durante el proceso de fermentación, comienza la oxidación y al ser más oxidado que otros tés posee mayor cantidad de teína (cafeína) y un color y sabor característico como lo es el de este té.

Como hemos indicado anteriormente, es uno de los tés con más dosis de cafeína, lo que ayuda a los despertares activos tanto de cuerpo como de la mente y a combatir la somnolencia en las primeras horas del día. Además, se recomienda tomar una taza de té negro diario para potenciar la actividad intelectual.

También es un antioxidante que nos ayuda a retardar el envejecimiento prematuro.
Dada la alta dosis de taninos que contiene el té negro, se convierte en un buen astringente para combatir problemas estomacales, diarreas o gastritis.

Muchos estudios realizados sobre las propiedades y beneficios en la salud derivados por la ingesta de té negro, han dado como resultado que es útil en tratamientos de algunas enfermedades graves como cáncer de colón o de mamá.
También se ha demostrado que gracias a sus efectos hipoglucémicos es un buen aliado para regular el azúcar en personas con diabetes del tipo 2, e incluso puede ayudar a prevenir las caries dentales si realizas enjuagues diarios con este tipo de té.

Ahora que ya conoces un poco más acerca de los beneficios del té y del café, sea cual sea tu decisión a la hora de elegir que beber, ten la seguridad de que será muy buena elección.